Si pensáis que me he hecho de twitter para promocionar Torrente 4, estáis totalmente... en lo cierto. Señoras y señores con todos ustedes, el inventor de la promoción cinematográfica en España: Santiago Segura. Amado y repudiado a partes iguales, su icono de lo soez, José Luis Torrente se ha convertido en el personaje más famoso del cine español. ¿Cómo es posible que un ser tan sumamente vomitivo haya llegado a los espectadores? La respuesta es sencilla: detrás del personaje hay alguien que sabe venderse. Parecen inviables los datos de Torrente viendo el panorama audiovisual actual: 3 entregas millonarias y ahora una cuarta en 3d. El cine `palomitero´ de Santiago Segura basa su éxito en una pérdida de vergüenza total a la hora de vender su película. Nadie sabe venderse en España como él y eso lo demuestran los números de taquilla. En menos de 2 semanas, seguro que el Torrente IV del rey midas del cine español habrá recaudado los más de 10 millones de euros que ha costado. Su estrategia es sencilla y, a la vez, complicada: Que todo el mundo sepa que su hijo del alma llega de nuevo a las salas el día 11 de marzo. Único a la hora de subirse a las últimas herramientas de promoción, Segura se abrió una cuenta en Twitter semanas antes de estrenar la cuarta entrega del brazo tonto de la ley. Le hemos visto en El Hormiguero, DEC, La Noria, Qué Tiempo Tan Feliz, en varias revistas, radios..... Se dirige a todos los públicos .De ahí, lo variopinto de meter en la misma película a personajes tan dispares como Belén Estéban , Cañita Brava o el ídolo adolescente Yon González. Solo hace falta acercarse a una sala de cine para ver a adolescentes pajilleros, padres e incluso abuelos, aunque estos últimos podría parecer que no comulgasen mucho en el humor grueso de la saga . Utilizando el humor y , sobre todo, unos cameos del todo atractivos, Segura vertebra su discurso promocional bajo una premisa: no desvelar el argumento. De ahí que las entrevistas, en ocasiones, sean cuanto menos surrealistas. En DEC le entrevistaron en una especie de puticlub televisivo y en Qué Tiempo Tan Feliz tuvo que marcarse unos bailes con la Campos. Con ese secretismo exacerbado, aumenta aún más la expectación. La suma de los factores que , en este caso, si altera el producto, hace que Segura nos la haya vuelto a colar. Nos ha vuelto a vender la misma moto de siempre, pero con gran gusto la está recibiendo un público deseoso de desdramatizar la crisis que tantos quebraderos de cabeza nos está dando .
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